Deseo que más manos de juego se sintieran como el Snapdragon G3X.

En diciembre, Qualcomm reveló su incursión en el mundo de las consolas de juegos, una especie de. El Snapdragon G3X fue un sistema de juegos de mano tradicional construido con nubes y juegos móviles en mente. Solo había una captura: en realidad no podías comprarlo. El dispositivo, hecho en colaboración con Razer, solo estaba disponible para que los desarrolladores se juguean.

Así que, naturalmente, estaba en la pantalla completa en el stand de Qualcomm en la conferencia de desarrolladores de juegos de este año, donde llegué a tomarlo para una prueba de manejo. Mientras me alejaba aún escéptico acerca de la necesidad de una computadora de mano en la nube, me encontré deseando que otros fabricantes de hardware tomen nota de su diseño cómodo.

el ajuste correcto

El Snapdragon G3X me impresionó de inmediato cuando entré en la cabina de Qualcomm. Su pantalla OLED de 6,65 pulgadas explotó los colores vibrantes que me llamaron la atención incluso desde lejos. Es solo un cabello más pequeño que la pantalla del interruptor Oled, pero la calidad de la imagen es comparable. Donde el Snapdragon G3X obtiene el borde está en la tasa de actualización, ya que es capaz de golpear 120Hz.

La máquina que recogí estaba ejecutando un juego de carreras móvil, pero no me di cuenta de que inicialmente. Pensé que estaba jugando un juego de conducción de consola que se estaba quedando en la nube, así es como es la pantalla. El rendimiento increíblemente suave y los visuales de primera categoría dejaron en claro que el dispositivo realmente podría exprimir todas las gotas de energía de un juego móvil de gama alta como call of Duty Mobile o Fantasian.

Esa parte no fue sorprendente, pero me sorprendieron lo natural que se sintió el dispositivo en mis manos. Es una computadora de mano ligera donde se siente casi cada botón, como si estuviera en el lugar correcto. El Gamepad se siente estrechamente relacionado con Kishi de Razer, lo que tiene sentido considerar que la compañía ayudó a crear el Snapdragon G3X. Lo único que se sentía ligeramente fuera fue la dinámica de los desencadenantes y los parachoques, ya que me encontré necesitando reposicionar mis palmas para cambiar entre los dos (un problema común que he notado con dispositivos de mano a partir de retraso).

¿La mayor revelación de todos? Empuñaduras Eso probablemente suene completamente mundano a cualquier persona que use un controlador, pero considere que las empuñaduras nunca han sido el estándar para las computadoras de mano. No es un solo de los sistemas de mano de Nintendo, del juego de juegos hasta el interruptor, tiene agarres. PSP, N-Gage, Kishi, Cubierta de vapor: todos ellos optan por esquinas redondeadas.

Nunca me di cuenta de eso antes de contener el Snapdragon G3X. Simplemente se sienta mejor en mis manos que quizás cualquier dispositivo de juego de mano que haya utilizado. Los empuñaduras proporcionan un ajuste natural y lo hacen sentir como si estuviera sosteniendo un gamito adecuado con tripas dentro.

En ese sentido, obtengo lo que Qualcomm va por aquí. Si bien la idea de comprar un nuevo dispositivo para juegos que puede jugar en los que ya posee, ya no tiene mucho sentido, el caso de uso está claro aquí. Los jugadores móviles serios podrían encontrarse invirtiendo en periféricos para que su teléfono se sienta como una consola adecuada. Controladores, clips, paquetes de baterías y más se suman. El Snapdragon G3X eliminará teóricamente la necesidad de todos los trabajos adicionales necesarios para transformar su teléfono en un dispositivo diferente.

Aún así, la audiencia de él parece estrecha, por lo que el dispositivo tiene más sentido como un kit de desarrollador por ahora. Tendría que lanzar a un punto de precio bajo, incluso más bajo que el interruptor, tal vez, para los números para sumar. Con esa advertencia en mente, el Snapdragon G3X ciertamente se ve y siente la parte. Tal vez Razer y Qualcomm pudieran prestar la pantalla y diseñar a la válvula para hacer que la plataforma de vapor 2 en una verdadera potencia.